El Museo Ghibli, la magia de la animación japonesa

Museo Ghibli cartel

Uno de los lugares que más esperaba visitar en nuestro viaje a Japón era el Museo Ghibli, dedicado al estudio de animación homónimo responsable de películas como El Viaje de Chihiro, El Castillo Ambulante o Mi Vecino Totoro.

El paraje donde está situado, el bosque de Mitaka, ya ambienta la sensación de estar a punto de entrar en otro mundo, y cuando llegas a la falsa taquilla exterior con un Totoro a tamaño natural al otro lado del cristal, lo confirmas. La taquilla real se encuentra en la entrada del museo, y canjeas los tickets cutres que puedes sacar por adelantado en algunos conbini por un blister con 3 fotogramas de sus películas, toda una joya para los coleccionistas; a nosotros nos tocaron de El Viaje de Chihiro y Mi Vecino Totoro, y aunque no eran escenas relevantes molaban un montón.

Museo Ghibli TotoroEl Museo Ghibli consta de 3 plantas y un ático exterior: la planta baja está diseñada para los más pequeños, con una salita llena de dioramas y figuras de varios filmes que gracias a unas luces estroboscópicas puedes ver en movimiento. Podía ver a Totoro o a Nicky la Aprendiz de bruja moverse y saltar, y a pesar de no ser precisamente una niña también me quedé con la boca abierta. La otra sección importante del piso inferior es una sala de proyecciones donde se pueden ver cortos animados exclusivos del museo. Tienen unos 8 y van cambiándolos, con lo que una segunda visita te garantiza algo nuevo. Nosotros vimos uno mudo sobre una niña que se va de excursión al campo en el que las onomatopeyas eran visibles y tenían cuerpo, llegando a empujar a la protagonista en ciertos momentos. Muy curioso y entretenido.

El guardián de Laputa, el Castillo en el Cielo que hay en la azoteaLa segunda planta muestra las distintas fases en la creación de una película: desde la documentación, diseños, animación y coloreado, vas pasando por diferentes salas y puedes ojear storyboards de sus películas, libros de paisajes, fotolitos con las asignaciones de color, etc. Por aquel entonces tenían una exposición temporal sobre su última película Ponyo en el Acantilado donde podías ver cómo la animaron a través de pequeños vídeos, libros y cajas con manivela de algunas escenas, y aunque no es de mis películas favoritas me hizo apreciar el esfuerzo que pusieron en ella. Como curiosidad, tenían en el centro de una sala los más de 700.000 acetatos y fotogramas que compusieron la película, un montón enorme.

La tercera planta contiene una sala con un Gatobús y suelo acolchado para que los peques puedan jugar y la tienda de souvenires, con cosas preciosas pero a un precio excesivo. Algún día tendré dinero para comprarme una maqueta del hidroavión Savoia S21 que pilota Porco :). En la azotea hay una  estatua de metal de uno de los guardianes de la película Laputa a tamaño real, lástima que lloviese y no pudiéramos disfrutar de las vistas de Mitaka que se divisan.

Lamento mucho que no haya casi fotos del lugar, están prohibidas en el interior y ese día llovía, así que las de los exteriores fueron muy pocas. Gracias a Flapy y Wilbur por prestarme las suyas 🙂

Vidriera paraguas

Detalle de las vidrieras del museo

Ghibli Museum lunch

En la cafetería restaurante la comida tiene nombres relacionados con las películas de Estudio Ghibli

Museo Ghibli

El autobús que pasa por el museo está decorado con motivos de la película Mi Vecino Totoro

Cómo llegar al Museo Ghibli de Tokio:

Aunque la forma más sencilla y cómoda de llegar es tomar la línea Chuo hasta la estación de Mitaka y desde allí tomar el mini-bus (fácilmente reconocible) que lleva hasta el museo, si se cuenta con tiempo suficiente es recomendable bajarse en la estación anterior, Kichijoji. Caminando hacia el suroeste desde ahí atravesarás el parque de Inokashira, que lo cierto es que tiene unas vistas bastante más bonitas que el camino alternativo 🙂

El precio del tren JR desde la estación de Tokyo hasta cualquiera de las dos paradas es de 380¥, y el mini-bus del museo Ghibli cuesta 200¥.

Recursos:

El parque de las ciencias de Granada

Parque de las Ciencias de Granada

En nuestra visita a Granada no sólo pudimos echar una mirada al pasado en la Alhambra o la catedral, ni únicamente estuvimos de tapeo por sus calles. Otro de los atractivos de la ciudad es el moderno parque de las ciencias, que podemos encontrar a escasos 20 minutos a pié del centro histórico.

Nada mas llegar al parque nos encontramos sentado en un banco a la sombra a Albert Einsten, que nos daba la bienvenida al edificio principal del recinto en el que, al igual que en el Cosmocaixa de Alcobendas, lo que más llamaba la atención tras entrar era el péndulo de Foucault que da el nombre a éste pabellón.

Parque de las Ciencias de GranadaLa entrada tenía un precio de 6’50€ que en principio puede parecer algo caro, pero hay que tener en cuenta que puedes pasar el día entero viendo cosas y aun así faltarte tiempo, así que gustosamente pagamos y fuimos recorriendo las distintas salas temáticas que se albergan en ésta primera nave. Salas dedicadas a la física y la mecánica, a la óptica y la luz, a la biosfera, incluso otras con juegos y experimentos curiosos para niños y, en la parte más alta del edificio, el planetario -que por falta de tiempo no pudimos visitar-.

Antes de que pudiéramos darnos cuenta se nos había pasado prácticamente toda la mañana, ¡y todavía no habíamos pisado el exterior!

Parque de las Ciencias de GranadaAl salir al patio central, como si fuéramos niños, empezamos a enredar con todos los «juguetitos» que había, con los que experimentamos curiosidades sobre el sonido, el agua y la astronomía, o cómo la perspectiva puede distorsionar nuestra percepción visual de las cosas. Por supuesto subimos a la torre de observación y admiramos todo el skyline de Granada desde lo alto y con la sierra de fondo, no sin leer todas las notas y curiosidades sobre los edificios, las montañas y demás que allí nos contaban.

Siguiendo hacia la derecha del patio y tras pasar un ajedrez gigante, vimos otras carpas más pequeñas, un jardín botánico (con laberinto incluido) y un mariposario en el que paramos bastante tiempo intentando sacar alguna foto decente de las impresionantes mariposas que volaban y planeaban a nuestro alrededor. Lamentablemente la falta de luz y de euros invertidos en equipo (además de nuestra torpeza) nos obligaron a conformarnos con fotos de cuando estaban posadas cerca comiendo fruta o descansando 🙂

Por desgracia no pudimos visitar el macroscopio, que es el edificio de más reciente incorporación al parque, pero el día se estaba acabando y queríamos ver la Alhambra al atardecer desde el mirador de San Nicolás. En fin, ¡así tenemos excusa para repetir cuando volvamos!

Papilio Demoleus. Una de las mariposas que se encuentran en el mariposario.

Papilio Demoleus. Una de las mariposas que se encuentran en el mariposario.

El péndulo de Foucault preside el pabellón principal.

El péndulo de Foucault preside el pabellón principal.

Parque de las Ciencias de Granada

Ajedrez gigante en la parte exterior

Parque de las Ciencias de Granada

El Parque de las Ciencias visto desde la Alhambra

Cómo llegar:

El parque se encuentra situado al sur del centro histórico de Granada, a 20 minutos a pié. Una vez cruzado el río Genil habrá que seguirlo hacia el este. La entrada al parque se ve fácilmente desde la Avenida del Mediterráneo.

Recursos:

España Original 2012, gastronomía de calidad

Feria gastronómica España Original

La semana pasada acudí de invitada por Globalcaja con un grupo de bloggers a España Original, una feria gastronómica en la que se dan cita las principales denominaciones de origen españolas y otros productos de alta calidad. Se celebró los días 8, 9 y 10 de Mayo en el Pabellón Ferial de Ciudad Real.

España Original sirve como punto de encuentro entre los productores y empresarios de las denominaciones de origen de todo el país con importadores y compradores al por mayor. Aunque la feria se abría al público por las tardes, las mañanas estaban reservadas a los profesionales del sector, con lo que el ambiente no era nada agobiante y se podía recorrer el pabellón tranquilamente y hablar con los empresarios de forma distendida.

Feria gastronómica España OriginalUna de las cosas por las que destaca España Original es por la llamada Galería del Sabor, una segunda planta llena de todos los productos disponibles en la feria, listos para degustarse. Cada uno tenía su ficha con las características del alimento en cuestión, empresa, y la situación del stand, lo que permitía a cualquier importador o distribuidor comparar y buscar con total libertad, juzgando los productos de forma más objetiva. Sinceramente, es algo que debería aplicarse en las demás ferias. ¿Y qué manjares había para catar? Prácticamente de todo: Jamón, aceite, queso, conservas de pescado, mermeladas, tomate, ajo, vino, pan, frutos secos y seguro que muchos más de los que no me acuerdo. La variedad era increíble y la calidad muy alta; si hubieran tenido venta al por menor, sé de un queso que habría caído.

Feria gastronómica España Original Tras la Galería del Sabor, estuvimos hablando con algunos de los empresarios, como al responsable de Kiele Gourmet, creadores de las anchodinas, sardinas tratadas como las anchoas, con una textura muy suave y que están exportando actualmente a Dubai; o los quesos Flor de Guara, realizados con leche de cabra y con una forma muy peculiar, que pertenecen a una pequeña empresa familiar que quiere seguir siendo pequeña. También tuvimos el placer de hablar con Domingo Eiriz, experto cortador de jamón, que nos dió unos cuantos consejos a la hora de degustar un jamón y las diferencias entre las 3 principales D.O. españolas.

La única pega que se le puede poner a España Original es el poco espacio disponible en el Pabellón Ferial, que consta de 3 pabellones unidos. Esta feria gastronómica se merece un lugar más grande, porque tiene la capacidad de crecer.

PD: En los recursos iré poniendo lo que han escrito el resto de blogueros que estuvimos esa mañana en Ciudad Real. Ha sido un gustazo conoceros y espero que volvamos a coincidir 😉

Feria gastronómica España Original

Vistas de los stands desde la Galería del Sabor

Feria gastronómica España Original

El jamón ibérico fué sin duda una de las estrellas de España Original

Feria gastronómica España Original

Productos de La Mancha que nos obsequiaron a los blogueros asistentes a la feria

Recursos:

El Museo Cosmo Caixa de Alcobendas, ciencia interactiva

Museo de la Ciencia CosmoCaixa de Madrid
NOTA: Por desgracia para todos nosotros, el Cosmocaixa cerró sus puertas el pasado 31 de diciembre de 2013. Sin embargo, seguiremos manteniendo este artículo como homenaje a un lugar que no debió perderse nunca.

El Museo de la Ciencia de Alcobendas, conocido también como Cosmocaixa, es uno de los ejemplos de que el saber es divertido y un lugar donde hace un par de veranos nos convertimos en niños de nuevo para descubrir el mundo que nos rodea.

Ya en la parte exterior de la entrada nos encontramos con la primera maravilla, una esfera de piedra de dos toneladas que, situada en un pedestal a medida, rota suspendida en el agua que sale por la parte de abajo. La entrada básica no es cara e incluye las exposiciones temporales, aunque si quieres ir al planetario o a alguna actividad para los peques puede subir bastante.

Museo de la Ciencia CosmoCaixa de MadridJunto a la taquilla se encuentra un enorme péndulo de Foucault, que con su hipnótico balanceo nos demuestra que la Tierra gira mientras va tirando lentamente cilindros de metal situados en círculo a su alrededor. Y es que los dos pisos de que consta el Museo de la Ciencia están repletos de artilugios relacionados con la física, la biología y la química con los que puedes poner en práctica las leyes de la óptica, el magnetismo o la evolución. Todos los experimentos van acompañados de una breve explicación para que los más pequeños (y no tan pequeños) puedan saber con qué está relacionado. También hay una parte de exposición tal cual, como los modelos de los homínidos más importantes o el mural enorme de la evolución de la vida en la Tierra, pero siendo educativos resultan interesantes y curiosos porque están presentados de forma muy interesante.

Museo de la Ciencia CosmoCaixa de MadridHe de decir que algunos padres parece que lleven a sus hijos a un parque, porque los sueltan sin control y los chavales se suben a los péndulos caóticos o rompen algunos experimentos con frecuencia. O no muestran ningún interés por lo que su hijo está haciendo o preguntando; una lástima porque es un lugar donde se puede aprender en familia.

Cuando estuvimos nosotros la exposición temporal era sobre dinosaurios (algo que personalmente me encantó) con fósiles reales procedentes del desierto de Gobi (Mongolia). Sin ser los más impresionantes que pueden verse, he de decir que el Tarbosaurus tiene un tamaño imponente y que disfruté como una enana leyendo sobre cómo las expediciones de principios del siglo XX descubrieron los fósiles.

Nosotros compramos también entrada para el planetario, donde nos proyectaron un pequeño documental sobre los 5 reinos en los que se dividen los seres vivos, todo ello con imágenes de microscópico electrónico de barrido impresionantes y modelos informáticos con los que nos podíamos meter dentro de una colonia bacteriana. Todo estaba muy bien explicado y nada complicado, ojalá estas cosas las hubiera podido disfrutar de pequeña.

En resumen, el Museo de la Ciencia CosmoCaixa es un buen lugar donde pasar la tarde de forma entretenida y aprendiendo cómo funciona el mundo en que vivimos. Tanto si vas acompañado con niños como si no, creo que es una visita obligada.

Museo de la Ciencia CosmoCaixa de Madrid

Esqueleto de Albertosaurus en la exposición temporal sobre dinosaurios mongoles

Museo de la Ciencia CosmoCaixa de Madrid

Experimentos sobre la tensión superficial del agua con jabón en figuras geométricas

Museo de la Ciencia CosmoCaixa de Madrid

Esqueleto de cocodrilo fósil donde se ve que apenas han cambiado en miles de años

Recursos: